Casi todos los pobladores de Texas eran norteamericanos, en el norte había pocos mexicanos.
En noviembre de 1835, un mes después de que México adoptara el sistema de República Central, los colonos texanos desconocieron al gobierno mexicano y en marzo de 1836 declararon al gobierno mexicano su independencia.
Santa Anna fue a someterlos. Tras derrotar a los texanos en El Álamo, Santa Anna avanzó hasta el río San Jacinto, donde acampó; ahí fue sorprendido y capturado por el general Samuel Houston. Trasladado a Washington, Santa Anna firmó los tratados de Velasco, en que reconoció la independencia de Texas. Los texanos sugirieron su anexión a Estados Unidos.
Frente a ello, los mexicanos manifestaron su inconformidad pero a pesar de ello el gobierno norteamericano aceptó anexarla a su territorio. Además, Estados Unidos se apoderó por la fuerza del territorio ubicado entre los ríos Bravo y Nueces. Hubo enfrentamientos entre mexicanos y norteamericanos; con ese pretexto los Estados Unidos declararon la guerra a México el 13 de mayo de 1846; lo que verdaderamente querían era apoderarse del territorio mexicano, era un episodio más de su proyecto expansionista motivado por la necesidad de satisfacer los requerimientos materiales de una creciente población y por su ambición de explotar los recursos naturales y las ventajas comerciales. La invasión comenzó en varios frentes:
California, Nuevo México, Matamoros, Monterrey y Veracruz. A este lugar llegó el principal contingente que avanzó hacia la capital. Los mexicanos no tenían suficientes armas ni dinero. Además, liberales y conservadores seguían luchando entre ellos. Sin embargo, la resistencia popular en todos los sectores de la sociedad, se manifestó. A pesar de ello, los ejércitos norteamericanos impusieron su dominio. Hubo muchas batallas, dentro de las que destacan la de Monterrey en 1846 en la que los soldados mexicanos comandados por el general Pedro Ampudia, resistieron durante 4 días con escasas municiones y sólo con raciones de mezcal que les daban antes del combate, mujeres y niños también lucharon; la de Cerro Gordo, la de lomas de Padierna, Churubusco, Molino del Rey, Chapultepec, etc.
Durante la invasión México también utilizó las guerrillas. Ante ello, Estados Unidos formó una campaña de espionaje con criminales liberados de las cárceles. El ejército mexicano estaba al mando del general Antonio López de Santa Anna quien integró un ejército novato de 12 mil hombres; creyó que el enemigo entraría por Peñón Viejo, pero no fue así, el general Scott entró por el sur de la ciudad, desactivando la estrategia de defensa de Santa Anna. Después de la derrota de Chapultepec, Santa Anna ordenó que su ejército abandonara la capital.
Todos los sacrificios y heroísmo del pueblo mexicano fueron inútiles. Los estadounidenses entraron al zócalo de México e izaron su bandera el 14 de septiembre de 1847. La ocupación duró 9 meses, hasta el 12 de junio de 1848.
Dentro de las consecuencias de la guerra están las siguientes:
a) México tuvo que firmar el tratado de Guadalupe Hidalgo, por el cual perdió más de la mitad de su territorio: la Alta California, Nuevo México, Texas y la región entre los ríos Nueces y Bravo que pertenecía a Tamaulipas y Coahuila; más de 2 400 000 km2 de territorio.
b) México recibió 15 millones de pesos.
c) Los objetivos expansionistas de Estados Unidos se cumplieron.
d) La derrota mexicana y la pérdida territorial hizo que los mexicanos sintieran la necesidad de estar unidos.
e) Surgió en México una importante corriente nacionalista que buscó promover en la población la formación de una conciencia de identidad nacional a través de la educación la literatura, el teatro, etc.
Cabe aclarar, que en 1852 colonos de Estados Unidos se apoderaron del territorio de la Mesilla, al norte de Chihuahua, que tenía una extensión de 109574 km2. Sólo hubo una defensa diplomática por parte del gobierno mexicano. Finalmente en 1853 el presidente Santa Anna la vendió en 10 millones de pesos.
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